En el campo particular de la robótica asistencial, el impacto es esperado es enorme, no sólo desde un punto de vista económico, sino también social: por un lado, los hospitales no son capaces de satisfacer las necesidades de acompañamiento de los pacientes ingresados con su plantilla actual, y robots asistenciales de este tipo podrían cubrir estas necesidades, mejorando así la eficiencia de los servicios hospitalarios. Por otro lado, los pacientes estarían más acompañados y serían menos dependientes, disminuyendo así la sensación de soledad y mejorando su bienestar durante los ingresos hospitalarios o en sus hogares.